Nadie es en realidad, quien dice ser, aunque extraña afirmación, típicamente verdadera. Estamos rodeados de personalidades neuróticas que buscan en la acción estimulante y euforizante del alcohol una falsa superación de sus conflictos psicológicos inconscientes y de su sentimiento de inseguridad.
Es un hecho repugnante que los charcos de nuestras ciudades en sus noches mas inmediatas estén formadas no precisamente de agua y mas absurdo aún que sus consumidores sean chavales que no superan siquiera la edad de la razón, aparte de la patética imagen que muestra nuestra querida juventud, al gritarnos a voces que no sabe divertirse si su cabeza no da vueltas debido a la ingestión nociva de la mezcla explosiva que suelen hacer sentados en las puertas de los edificios o echados en el coche, o tirados en la calle sin rumbo fijo, ¿esto es lo que llaman diversión? ¿Cómo puede una persona divertirse sin saber lo que está disfrutando?
Que se te corte el cuerpo, eches la "pota" en medio de la calle, que no puedas andar porque todos los músculos de tu cuerpo se te traben, que se te emboten los sentidos, que se te trastorne el habla llegando a la incoherencia total, eso es lo que llaman DIVERSIÓN. Desde tiempos inmemorables creo que no se ha escuchado cosa mas absurda.
Supongo que todos hemos "tomado" en alguna que otra ocasión. Cierto que unas copitas pueden llegar a deshinibirte si eres algo tímido/a, ya que, se sabe que en pequeñas cantidades estimula el sistema nervioso, pero produciendo no olvidemos, una euforia anormal en cualquier caso, euforia que puede llevarte a hacer cosas, que ciertamente fresco no harías ni loco, pero lo mas seguro es que te empujará a hacer el payaso/a también, a rayar en lo ridículo y hasta lo pesado.
La edad puede llevarte a hacer locuras miles, pero este no es solo un problemilla de adolescencia, es algo que puede crear precedentes y que de hecho los crea y como dignos progenitores de los vástagos pasamos por alto algo que les puede conducir al alcoholismo, a las drogas, etcétera, ya no como divertimento ni como vicio sino como adicción, como parte indisoluble de unas vidas maltrechas manchadas con la insignia de la libertad. Lo que se pretende con esta libertad engañosa, es poner a sus pies lo que quizás ellos no tuvieron en su momento llegando en la mayoría de las ocasiones a situaciones sin solución. Todo tiene su tiempo, y nada mas lejano de darle obligaciones ni deberes a quienes no los pueden cumplir, ya sea debido a su edad o inexperiencia.
La poderosa arma contra la timidez cada vez es mas solicitada e ingestada entre los mas jóvenes, la consumición incontrolada agregada a las ganancias que esto proporciona, rellenan las arcas de los sin escrúpulos, mientras ni sus progenitores, ni gobiernos, ni jefaturas, ni nada que se les parezcan hacen nada por remediarlo.
La imaginación es un lugar que todo el mundo quisiera frecuentar, pero somos nosotros mismos los que ponemos los obstáculos en medio del camino para no llegar a ella, nos cuesta decidirnos cuando se trata de una cosa tan simple como tomar una elección, pues no somos dueños de nuestros actos por mucho que nos empeñemos, dependemos de los demás, perdemos la personalidad siempre que se nos brinda la oportunidad de hacerlo, porque es más fácil dejarse llevar por lo que todos digan o hagan, como meros soldaditos de plomo vamos al son que otros tocan sin meditar si es eso lo que realmente queremos o necesitamos.
Con casi vida propia y astuto como una serpiente, penetra en las entrañas cual líquido engañoso que con claras intenciones dominantes alcanza su objetivo al ensañarse con los mas ineptos, no obstante lo trágico del tema radica en el protagonismo que se le proporciona al darle el sitio que en la sociedad tiene y que por derecho no merece.
De todas formas no hay nada de malo en perseguir los sueños, pues debería ser asignatura obligatoria en la vida, no obstante, que piensen los mas jóvenes, que esto no se consigue con la visión borrosa que el "cubata" provoca.
Siempre se baraja la posibilidad de que, el que juega con fuego está destinado a quemarse, pero todos sabemos que tal viabilidad no se queda en el camino y que siempre tarde o temprano se cumple.
"CORREMOS EN BUSCA DE UN DESTINO, Y POR VELOCES PODEMOS PASARLO DE LARGO."
(José Narosky)
Cynthia.